Hace 20 años, 6 de septiembre de 1991, en una semana como esta se estrenó en España El silencio de los corderos, una inquietante película que todos recordaremos con una relación con el famoso quid pro quo entre Jodie Foster y Anthony Hopkins.
La película fue la primera que se estrenó de la serie relacionada con Hannibal Lecter y fue premiada con 5 oscars de Hollywood. La película nos contaba la relación entre una investigadora del FBI y un psiquiatra que puede aportar información útil para la resolución de un caso bastante peculiar. La peculiaridad está en que se trata de un asesino en serie de mujeres que cortaba trozos de piel a sus víctimas, y en que el psiquiatra tiene tendencias al canibalismo.
El silencio de los corderos nos dejó varias escenas que todos recordaremos, como aquella en la que Hannibal se encontraba dentro de un cofre con la cabeza atrapada y babeaba por su sed sangre. Pero la escena de la película elegida y reservada para esta semana es aquella en que Buffalo Bill está encerrado ataviándose como una mujer desnudo y tratando de ocultar su miembro entre los muslos. Ni la escena ni la música tienen desperdicio. La recordáis?
El encargado de traernos esto a la memoria ha sido el amigo Gurces, el que a finales de julio se acordó de la fecha de estreno de la película y del título de la canción, y me lo sugirió para el blog. Ante tal momento cinematográfico y musical, no podíamos dejar pasar la oportunidad y le agradecemos su sugerencia y su aportación. (A ver si cunde!!)
La canción se llama Goodbye horses y es de Q Lazzarus, de la que apenas se conoce nada salvo esto. Recuerdo que cada una de las veces que he visto la película la música de la escena me encantaba, pero nunca me había parado a saber quién eran, ni cómo se llamaba la canción. Mira por donde, qué bien ha venido este blog de efemérides!!
Aquí os dejo el enlace. Espero que os guste.
Q Lazzarus: Goodbye horses
Muy bueno, muy bueno ¡y eso que hace unas horas aún no sabías a qué ibas a dedicar tu entrada semanal! Pues has estado muy acertado. Y has sabido evitar la efemérides más manida de estos días (ya se sabe: el 11-S), y sustraerse a eso no es fácil ;-)
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